Mediante esta seguidilla de fotos se puede visualizar el proceso y evolución que conlleva el crecimiento de una planta de ajo desde su germinación. Es una planta que tiene una germinación bastante rápida, entre 2 a 3 semanas despues de ubicar el bulbo (cabeza) completo en un recipiente con agua, tapando con esta la parte de la raíz (como se muestra en la imagen 1). Después de dos semanas la raíz empezó a crecer y ahi me di cuenta que era el momento de pasarlos a tierra. (imagen 2). Además de la raíz, cada diente de ajo formó un pequeño tallo. Después de la germinación siguió el momento de trasladarlos a la tierra. La forma exacta de ubicarlos en cuanto a distancia, es mas o menos a medio metro uno del otro, ya que cada diente de ajo plantado luego formará un bulbo completo, lo cual ocupa casi el triple. Para que sea un buen crecimiento es necesario ubicarlos de esta forma así cuando crecen no se chocan. La imagenes 6 y 7 muetran el momento anterior a ser enterrados. La raíz ya estaba super crecida.
Después de la plantación es necesario regarlos de vez en cuando, 2/3 días. No necesita un riego abundante. De hecho, cuando son plantados en campos no necesitan riego, la lluvia ya es suficiente. De aquí en adelante hasta terminar con la última foto, solo visualizamos el crecimiento de sus hojas, que proximamente y con el paso del tiempo estás empiezan a enredarse una con la otra y a secarse. Todavía este momento del proceso no ocurrió, pero quería aclarar que a partir de notar este cambio en las hojas la planta debe dejar de ser regada, ya que la humedad puede llegar a lograr que la planta se pudra.
En conclusión quiero rescatar que fue una buena experiencia notar su evolución todo el tiempo. Siento que fue creciendo conmigo en lo que fue el cuatrimestre de la materia. Yo también tuve mi momento de germinación y encuentro con mis primeros conocimientos con la cámara. Luego las prácticas y primeras experiencias lograron que vaya hacia adelante y crezca. Todavía sigo evolucionando.
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